domingo, 23 de agosto de 2009

...4

"No hay bueno ni malo, sólo hay concecuencias"...

Es de las enseñanzas, que más he encontrado sentido. Se refiere a la idea de que las cosas buenas o malas no existen, lo único que existe son las concecuencias de lo que en algún momento se nos ocurra hacer...

"interesante, muy interesante", pensé.

Después escuché que la misma persona había dicho "Los milagros son para los necios"... esta otra frase se refería a que todo ocurre por que así debe de ser y punto.

No, aquél sujeto no es ateo... y obviamente tampoco eran ideas a las que él hubiera llegado solo, tal y como sucede con casi todas las personas que se jacten de haber tenido ideas geniales o únicas.

Al menos eso es lo que también he aprendido.




domingo, 16 de agosto de 2009

Punto de vista.

Un Sábado cualquiera en casa, aproximadamente a las 11 de la noche.

Mientras dos de mis primos adolescentes tenían una sana convivencia basada en un juego para aquellos que les gusta el skateboarding (usan unos dados y dependiendo en qué caigan es el truco que deben ejecutar) en la sala... sí en la sala, por que ya era noche y cuando se va la luz del día no desperdician tiempo y se ponen a jugar con una "patineta de juguete". Una patineta a escala muy rara si me lo preguntan, en fin.

Mientras ellos jugaban alegremente, me senté a mirar la Tv. Generalmente no vemos bien su absurdo contenido, en esa casa nos limitamos a sentarnos, mirar al limbo y de esa manera "convivir en familia".

Una de mis tias de repente dice algo:

-¿Lorena, irías a una fiesta?
-Umm es que las fiestas me aburren.
-Jajajaja ¡qué te pasa!
- En serio, es que no tomo, no fumo... - iba a decir que si acaso iría a bailar, pero tampoco sé, cuando..
- Ya mejor vete a vivir al Templo
- No me gusta la vida de los templos

En esta parte mi dulce tia hizo una expresión como de "qué rayos sucede contigo", a lo que agregué:

- Sólo voy a las fiestas donde tengo que tocar o donde toca algún amigo.

A continuación silencio y a lo lejos mis primos jugando.

Una vez más me di cuenta de que encajo en pocos lados.

Me gusta salir, sólo que las fiestas donde todos se alcoholizan me aburren a no dar más, simplemente no le encuentro sentido. Hace algún tiempo sí, pero ahora ya sólo me dan sueño. Si toca alguna banda ya la situación cambia, si toco yo más me entretengo. Con los bares es igual. Una interesante conversación es lo que me anima.

Sin embargo el dialogo anterior también me recordó que no suelo encajar en lo cotidiano.

No soy de las personas que se sienta agusto en una parrillada o comiento tacos (de carne!).

Cuando me preguntan quien es mi grupo favorito, no tengo respuesta, ya que hasta donde sé no soy fan de nadie. Me gustan algunos grupos pero no sé bien su historia ni todos los nombres de sus integrantes, no tengo todos sus discos y cuando dan conciertos y puedo ir lo disfruto mucho, pero si no, no me afecta.
Lo que más me atrae de los grupos o de quién compone es el resultado de su creatividad, lo que me transmite su música. Es a últimas, que Josué me ha animado a tener los discos de ciertas agrupaciones o tal vez a asistir a una que otra presentación.

Admito también en cuanto a los fanatismos de cualquier tipo que sólo los acepto y respeto, pero nunca he podido entenderlos.

Ni siquiera encajo en el estereotipo referente a la persona encargada de un internet:
Los videojuegos o juegos por computadora y todos sus derivados no me llaman la atención, así que no es algo que use para entretenerme aquí en el negocio. A veces sólo estoy leyendo algún libro o repasando algún tema para un examen de la prepa abierta y a pesar de estos comportamientos un tanto nerds y de pasar con decentes calificaciones, ¡sigo en preparatoria!, pude haberla terminado en un año, pero no lo he hecho.

Los ipods y esos artefactos me eran totalmente ajenos hasta hace unos días.
Me resultaba gracioso cuando veia a mi hermano acomodando toda su música en el itunes, decenas y decenas de grupos y canciones. Todo ello le llevaba mucho tiempo (horas), para que en algún momento se le trabara la lap y todo se le borrara. No entendía para qué toda esa pérdida de tiempo, después de todo sólo lo usa cuando anda en la calle, para no "aburrirse".
Ahora admito que es útil, para repasar y/o estudiar una y otra vez alguna canción y para eso pretendo utilizar el valioso aparatito.

Es por todo lo anterior y demás actitudes que mi tia, "preocupadamente" me dijo que por qué no vivía en algún templo. Pero la verdad siento que ni ahí pertenezco, eso de ser ermitaño se me haría insoportable en algún punto.

Y aún con todo lo anterior me encuentro libre de tendencias suicidas y me agrada estar viva, es sólo que este es mi sencillo punto de vista.


;)

lunes, 10 de agosto de 2009

Lo más fácil es criticar.

Ahí estábamos, bajo la lluvia y esperando nos dejaran entrar...
Al lograrlo después de algunos "movimientos burocráticos" (jajajaja), no podíamos dejar de preguntarnos cómo rayos terminamos ahi...

El lugar se hallaba en algun lugar de insurgentes y estaba semivacío.
Se escuchaba una banda de metal y me sorprendió que no me doliera la cabeza, recordé que el sinverguenza de mi hermano solia llamarme "abuelita" cada vez que le pedia que bajara el volumen a su escandalo "metalero".

Pero ahi estabamos... desde Que comenzara a estar en un grupo musical en forma, me di cuenta de Que lo más fácil cuando se toca un instrumento musical (o se cree que se toca), es criticar.

"Ah se equivocó ahi", "yo pude hacerlo mejor" y mil etcéteras...
Cuando te toca estar arriba siendo tú el que es despedazado por las mordazes lenguas de desconocidos o peor aún de conocidos se siente una punzante sensación de... siento Q aquí la respuesta varía de acuerdo a la persona.

En mi humilde caso, sentí una mescolanza de sensaciones: fracaso, frustración e ira, básicamente. Una a una se deslizaban por mi garganta, haciendo un nudo difisil de pasar, para después llegar al estómago y quedarse ahi un rato.

Es lógico pensar Q ahí, en esos momentos de presión, es donde puedes darte cuenta si es verdad que "muy acá".

En mi caso fue una triste y densa descepción... o eso creí.
He aprendido algunas lecciones derivadas de mi precaria experiencia en el medio musical y una de ellas fue que criticar a simple vista, entra en la lista de las acciones más fáciles de realizar.
Aguantarlas, sin que influyan en tu autoestima y desición de seguir con lo que ya elegiste... Eso es otra cosa.

(No sé por qué, pero eso último me sonó a comercial. ¡¡¡Pinche publicidad!!!)

Ah si... pues esa valiosa lección aprendida con tanto esfuerzo, fue totalmente pasada inadvertida cuando viera a el último grupo de metal de esa noche, tocando Black Sabath a tan desastrosa velocidad y el peor cover de "toxicity" que haya escuchado, todo mal aderezado con unas vestimentas que admito provocaron algunas risas (no sólo mias, aclaro): cubrebocas negros, una especie flecha dibujada en el rostro de uno de ellos al estilo kiss o algo asi.

En fin, ya son muchos detalles pero comprendo que a pesar de todas las críticas que he recibido, sigo sin entender y sigo criticando.

Bueno ya será mi turno de dejar de qué hablar, pero jamás olvidaré semejante ejemplo de falsa pose.

Vale la pena mencionar dos momentos:

-Cuando llegó el turno en el escenario de la banda donde Josuédric es miembro y éste,
al termimar de tocar "Space Dementia" (y en medio de aplausos) se le ocurrió contestar su celular. ¡¡No fue su culpa, le estaban hablando!! jaja.
-Cuando a la salida, un amigo dijo acerca del vocalista de aquél último grupo bien metalero: "yo pensé que vendía pulseritas, por que traía un buen"

Jajjajajajaa.

Qué cosas.

domingo, 9 de agosto de 2009

El Q se enoja pierde

Hoy me había levantado de lo más feliz, sin recordar que la mente es siempre cambiante ante las diferentes situaciones que puedan presentarse.
Y así es esto, siempre andamos moviéndonos en la dualidad (bueno-malo, feliz-triste) y difisilmente se puede alcanzar algún estado de equilibrio, el cual por cierto es totalmente inexistente para algunos.
Nada es para siempre, nada. Así de simple.
Pues así me encontraba yo... bien feliz, cuando un par de desagradables comentarios se dejaron escuchar por algunos miembros de mi familia en torno a mi aspecto y la razón del mismo...

Chale, sentí el bajón en el ánimo y de haber tenido 16 de nuevo hubiera hecho una rabieta al estilo niña mimada. De alguna manera sólo me hizo pensar que no importa lo que hagamos, hay cosas que nunca cambiarán y no podemos controlar...y que eso tampoco es razón para traumarse.

"El Que se enoja pierde" es algo que suelo repetirme cada que alguna situación desagradable o desastrosa pasa como resultado de hacer algún coraje o simplemente enojarme.
Pero siempre, hasta ahorita, me daba cuenta después de ya haber cometido el error y no antes.

Esta vez fue distinto. Trataré de relajarme, reirme un poco y seguir con mi vida, pues pretender que todo mi entorno sea perfecto es una verdadera y absurda necedad.

Así que no hay de otra, habrá que seguir batallando con esta forzada dualidad y seguir averiguando si algún equilibrio es posible.

A final de cuentas, con quien realmente es el enojo es contra uno mismo y lo más fácil es creer que es contra los demás.

jueves, 6 de agosto de 2009

Crónicas de un internet...

Resulta que en este negocio sí se trabaja, aunque luego mucha gente llega bien modosita a pedir todo tipo de cosas. Recuerdo bastante claro cuando una joven de unos 18 me pide bien prepotente que le dijera como hacer códigos Html...
-Como éstos- me dijo señalando su cuaderno con un buen de códigos... deduje que era su tarea.
Me estaba pidiendo por no decir exigiendo que hiciera su tarea.
Chale, si por eso yo no voy al sistema escolarizado, para evitarme absurdas tareas.

Creen que por que atiendo un negocio de internet debo saber de codigos html?
Si apenas y puedo crear una cuenta de blog, ya no digamos un Twitter... jajaja

Cuando llegué a este trabajo ni siquiera tenia una "cuenta de correo", pero me las tuve que arreglar, nadie me dijo yo solita le encontré el modo, al igual que con todas las demás páginas ya sea para buscar información o cosas como Myspace... incluso Hi5, si lo admito, tuve uno (¡!).

No me molesta trabajar, por que es una realidad que hoy en día pocos quieren trabajar en serio, muchos sólo lo hacen a medias. Lo Que llega a desesperame es lo inútiles que pueden llegar a ser algunos, pero sobre todo huevones (creen que por que pagan unos pesos ya soy su secretaria).

Hace rato vino un señor ya grande. Quería que le hiciera unas etiquetas para los cuadernos de sus nietos, me supongo. Me dijo que quería unas que dijeran el nombre, el grado y la materia. Argumentaba que él no sabía naada de computadoras (eso ya lo he escuchado tantas veces).
Lo miré pensativa y me dijo.
-No le veo ganas verdad...
Me hizo sentir bien incompetente, alguien negligente que no queria ayudarle a un buen anciano.
-bueno-le dije.

Me tarde un buen, por que el señor la queria con una determinada letra y tamaño. Primero lo hize con Word, pero no quedaba, entonces me dijo que por qué no lo hacía en Excel, con letra del 12 y enmarcado...
"fuck!, que no se suponia que no sabe de computadoras?" pensé.
Total que me tarde más de lo que creía y luego llegaron así más pedidos: escaneadas, impresiones...
No entiendo como funciona la mente humana o a qué se deba, pero he notado que de alguna extraña manera a todos los clientes se les ocurre pedir cosas al mismo tiempo.
Llegan como en cascada, o de plano no vienen.
Es raro, pero cierto, o está hasta la madre o simplemente no está.

Después de tanta trivialidad, me conformo con haber manejado todo bien un día más y no haber explotado en un mar de insultos contra los pobres que "no saben de computadoras".

Gulp!

martes, 4 de agosto de 2009

...3

Ser conciente del presente es aún más inquietante que la ilusión más elaborada.

lunes, 3 de agosto de 2009

... 2

Es una necedad apegarse al resultado.